Entre
salsa verde, limones, pozole, chalupas y claro no podía faltar el tequila, las
familias poblanas se empiezan a reunir para dar el grito de ¡Viva México!; el verde,
blanco y rojo empiezan a tener su aparición en todos los adornos, desde cadenitas
echas de papel china, manteles, faroles y porque no hasta los coches con
sombreros y enormes bigotes que ponen muy a dock con el 15 de septiembre.
En la casa de la familia García,
desde temprano empiezan los preparativos, las mesas se visten de manteles
blancos con encaje tricolor en las orillas, el olor del pozole empieza a bañar
toda la sala, alrededor de las 19:00 horas empiezan arribar todos los nietos y
nueras de la señora Tere, caracterizados por los trajes de charro e impecable botas lustradas, mientras que sus
nueras con blusas coloridas, faldas llenas de lentejuelas con un brillo excepcional y con elaboradas trenzas con listones .
Ya todo estaba listo para celebrar
el 15 de septiembre y gritar a una sola
voz el ¡Viva México! , en punto de las 23:00 horas se enciende el televisor de
gran tamaño para que todos puedan observar al presidente C. Felipe Calderón
Hinojoza como rinde homenaje a todos los héroes que le dieron patria y libertad
de México.
El presidente sale al balcón
acompañado de sus 3 hijos y de su elegante esposa, portando un esplendoroso
traje típico de Tabasco con estampados bordados a mano, a escasos minutos de comenzar la ceremonia
los niños empiezan a percatarse de la presencia de comandos fuertemente
armados.
Entre salsa verde, limones, pozole,
chalupas y claro no podía faltar los operativo de seguridad , una combinación
exquisita , en donde no sabes, que el estruendo que se escucha a lo lejos es de
un cuete o fue una detonación de arma de fuego.
Así pasaron un 15 de septiembre la
familia García, con un encrucijada de emociones sin impedirles gritar a todo
pulmón ¡Viva México!
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